martes, 30 de diciembre de 2008

Un nuevo año de amor...


Si yo hablase lenguas humanas y angélicas,

si no tengo amor,

vengo a ser como el metal que resuena

o el címbalo que tañe.


Y si tuviese el don de la profecía,

y entendiese todos los misterios y toda la ciencia,

y si tuviese toda la fe

de tal manera que trasladase montañas,

y no tengo amor,

nada soy.


Y si repartiese todos mis bienes para dar de comer a los pobres,

y si entregase mi cuerpo para ser quemado,

y no tengo amor,

de nada me sirve.


El amor es sufrido, es benigno,

el amor no tiene envidia,

el amor no es jactancioso, no se envanece,

no hace nada indebido, no es egoísta,

no se irrita, no guarda rencor,

no disfruta de la injusticia,

mas se goza en la verdad.


El amor todo lo sufre,

todo lo cree,

todo lo espera,

todo lo soporta.


San Pablo


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Que este año que apenas comienza,

el verdadero Amor colme vuestros corazones,

y les dé toda la felicidad que se merecen.


¡Feliz Año Nuevo!
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Hasta mañana, si Dios quiere.
Imagen de Patty Mitchum. Gracias

sábado, 27 de diciembre de 2008

Por este año...


Gracias Señor.

Por este año que casi acaba.
Por nuestras familias,
y por las familias de los demás.
Por los momentos vividos
y por los momentos perdidos.
Por nuestros aciertos
y por nuestras miserias.
Por las alegrías
y por las tristezas.
Por el trabajo
y por el descanso.
Por las ilusiones
y por las decepciones.
Por los amigos
y por los enemigos.
Por la vida
y por la inexplicable muerte.
Por la salud
y por la enfermedad.
Porque estamos vivos.
Porque podemos pensar.
Porque podemos soñar.
Porque podemos esperar.
Porque podemos construir.
Porque podemos perdonar.
Porque podemos compartir.
Por lo que tenemos
y por lo que carecemos.
Por lo que sabemos
y por lo que desconocemos.
Por lo que somos
y por lo que no somos.
Y sobre todo,
Porque podemos amar
Y creer en ti.
Gracias Señor.

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Hasta mañana, si Dios quiere.

Imagen de Pamela Franklin. Gracias

miércoles, 24 de diciembre de 2008

Navidad...


Dentro de pocas horas,

un milagro de AMOR,

el más grande y bello,

se hará realidad en los corazones

de los hombres.


Que esta noche mágica,

Dios os conceda

solo cosas buenas y dulces...


Que por cada lágrima derramada,

mil sonrisas os cubran...


Que todo lo que hagan y digan,

sea lo mejor que puedan hacer y decir...


Que la paz del cielo os acompañe...


Que reciban más amor y afecto

del que puedan dar...


Y que se sientan felices,

tanto,

como se merecen.

Feliz Navidad a todos.

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Hasta mañana, si Dios quiere.

Imagen de Ron Jones. Gracias

martes, 16 de diciembre de 2008

Vano...


¡Mundo!


Encadena mi alma.

Clausura mis labios.

Cubre mis ojos.

Sujeta mis manos.

Detén mis oídos.

Apresa mi piel.

Esclaviza mi pensamiento.

Sella mi corazón.


Vano esfuerzo…


Lo amo y lo amaré hasta la eternidad.

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Hasta mañana, si Dios quiere.

Imagen de Nataliya Peregudova. Gracias

jueves, 11 de diciembre de 2008

Con un solo beso...


Irrumpiste con un sueño entre tus labios,
y cubriste mis vacíos con silencios acunados
en ocasos…

Me trenzaste de cascadas la mirada,
y arropaste mis inviernos
con caricias revestidas de mañanas…

Inventaste la agonía de evocarte en mi sosiego,
y sembraste de agualunas la locura de abrazarme
a tu recuerdo…

Me bordaste el corazón a tus espaldas,
con la espera de un –te quiero- que no acaba…

Irrumpiste con tu magia...
y con un solo beso...
me robaste el alma…

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Hasta mañana, si Dios quiere.

Imagen de Axel Bueckert. Gracias

martes, 9 de diciembre de 2008

Como sal y arena...


Nunca olvidaré la primera vez que estuve frente al mar -¡cuántas veces había soñado con ese momento!-

Recuerdo que todos mis sentidos se llenaron con la imagen que tenía ante mi ser. Mis ojos, deslumbrados con esos rayos dorados que chocaban en el agua y dejaban sentir en mi piel un delicado ardor; mis oídos, embelesados con el suave canto de las olas al romperse en mil colores; mi nariz, colmada de ese aroma tan especial, mezcla de pureza e intensidad, y por supuesto, mi tacto, descubriendo la sensación mágica de la arena atrapando mis pies, sintiendo en cada paso que daba que la vida era eso… un caminar entre sal y arena…

Muchas veces en mi vida he evocado ese momento, y cómo empapó mi alma de dulzura, pero también de un sentimiento de humildad, ante la majestuosidad de la naturaleza y la inmensidad del amor de Dios…

Fue ese caminar en la playa, y la sensación de mi alma aquel día, la que provocó en mi interior una inquietud que, ahora lo sé, fue realmente un regalo inmerecido de Dios.

-¿Qué somos?, ¿de qué estamos hechos?- me pregunté -¿Tenemos acaso una vida interior dentro de este cuerpo, que nos ayuda a caminar por la vida?-

El tiempo me dio la respuesta. Ese día descubrí que poseemos una vida espiritual dentro de nosotros, que tenemos qué alimentar y cuidar, si lo que anhelamos va más allá de lo material.

Esa espiritualidad, amigos queridos, inherente a todos nosotros, es la comunicación más profunda y genuina con Dios, con nuestros semejantes y con nosotros mismos. Es un fuego interior, una capacidad profunda y mágica que nos lleva a vivir el misterio de nuestra existencia, encarándonos con lo que somos y con nuestro Creador, y logrando que nos sintamos reconfortados y plenos por el maravilloso y único privilegio de vivir…

Permitan que les diga, amigos queridos, a qué nos ayuda esta espiritualidad. Nos alienta a tener un porqué en la vida. Nos ayuda a alimentar un anhelo que no sabemos describir ni nombrar, pero que no por eso es menos real debido a nuestra incapacidad para capturarlo en palabras, y que gracias a él, nuestros días se visten de esperanza, de fe y de amor…

Y aún les puedo decir, sin temor a equivocarme, que la riqueza más grande de vivir una vida espiritual, no es amasar un caudal de conocimientos o de experiencias efímeras, sino el poder encarar los momentos difíciles de la vida con gozo, con mansedumbre, con entereza y honestidad, con paciencia y sabiduría, y con la seguridad más profunda de que, pase lo que pase, no estamos solos, porque el amor de Dios nos acompaña hoy y siempre…

¡Ahora lo sé!

He aprendido a vivir mis días intensamente, con el gozo más profundo, porque poseo un cuerpo y un alma… como la sal y la arena de la playa…


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Hasta mañana, si Dios quiere.

Imagen de José Andrés Zumaquero. Gracias

viernes, 5 de diciembre de 2008

Albayana...


-El campo es el mejor ambiente para la espiritualidad-, me dijo hace poco un amigo muy querido.

Hoy, os invito a mirar el mundo a través del alma de cuatro personas. José Del Moral De la Vega y sus hijos Diego, Jerónimo y José, de la mano de Albayana Ideas, los llevarán a recorrer caminos encantadores, salpicados de poesía, de cuentos del campo, de anécdotas con sabor a vida, de música para bailar con el alma, y todo, bajo el sello inconfundible de una gran sensibilidad y cálida sencillez.

Quede pues, constancia de mi cariño por todos vosotros, amigos de mi alma, al compartirles el regalo maravilloso que yo he encontrado en este bello rincón.

Un beso a cada uno.

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Hasta mañana, si Dios quiere.

Imagen de Bruce Little. Gracias

martes, 2 de diciembre de 2008

Tú...


Me hace falta

la presencia de tu ausencia,

y ese beso silencioso

que fabrica mi existencia.


Me haces falta...

En el alma y en la cama,

y en el sueño que derrocha

esta calma que no acaba.


Me haces falta...

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Hasta mañana, si Dios quiere.

Imagen de Vit Dau. Gracias

jueves, 27 de noviembre de 2008

Lo sabes bien...


La letra S, sin saberlo siquiera, sella el silencio soterrado en el bullicio de un secreto: la soledad acompañada con un rayo de sol, pero no del sur, como se piensa, sino de un sitio lejano, sumido en el alma, sin sal ni arena, como si Svalbard me otorgara el paraíso de un sueño sosegado a base de sonetos de mar, de siluetas encallecidas con sentimientos salitrosos, con ecos secos plasmados en la silueta de una lejanía sin conquistar, carente del sentido único y fehaciente de volar… Amar…

La letra S siempre calla… engendrada en el suspiro susurrante de un segundo en tu ser…
Lo sabes bien... a contraluz.

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Hasta mañana, si Dios quiere.

Imagen de Andrzej Pradzynski. Gracias

miércoles, 19 de noviembre de 2008

Tu luz...


Y no llegas...
Y no importa que la tarde

se desnude de sus horas,

que la espera se disfrace

de una calma que no añora...


Y no llegas...
Y la vida se hace tiempo

que transcurre sin tu encuentro,

sin tu beso, sin tu cielo,

sin tu risa que es mi anhelo...


Y no llegas...
Y la lluvia se marchita

en el canto de mi luna,

en la faz de tu mirada

que pregona mi locura...


Y no llegas...
Aunque clame ya mi voz

que no existe nueva espera,

porque vivo con tu luz

que ilumina mi existencia...


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Hasta mañana, si Dios quiere.

Imagen de Johnny Jensen. Gracias

miércoles, 12 de noviembre de 2008

En ti...




En ti vaciarme yo quiero

y arrancarte el alma a besos,

inventando caracolas

que agonicen en tu cuerpo...


Vestir tu sosiego quiero,

y pintar de tonos luna

los susurros de cerezo

que alborotas en mi pelo...


En ti vaciarme yo quiero

y en tu piel resucitar,

si al morir, vivo en tu cielo,

si al vivir, muero en tu mar...

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Hasta mañana, si Dios quiere.

Imagen de Angie Chiara. Gracias

sábado, 8 de noviembre de 2008

Locura...


Descubrirte es la locura
de inventarte en cada sueño,
de vestirme de silencio
y abrazarme a tu recuerdo.

Descubrirte es el misterio
que conquisto cada noche,
al besarte en las estrellas
que susurran nuestro nombre.

Descubrirte es impregnarme
del aroma de tu cielo,
de la mar de tus amores,
de la ausencia de tu nombre.

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Hasta mañana, si Dios quiere.

Imagen de Tim Rosier. Gracias

sábado, 1 de noviembre de 2008

Bella como el sol...


¡Señora!
Se le cayó esta rosa
de su corazón...

Una rosa blanca
como lo es usted,
bella como su alma…
¿Puede usted creer?

Una rosa blanca
como ángel de Dios,
cuyas alas guardan
el amor en flor...

Mire usted, señora,
se le cayó esta flor,
blanca como el alba,
bella como el sol...

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Hasta mañana, si Dios quiere.

Imagen de Roberto Roseano. Gracias

sábado, 25 de octubre de 2008

Llenará mi mar...




Rosal sin espinas
tu aroma me embriaga
traspasando mi alma
con tu frenesí...


Desvela mi noche,
deshoja mi cielo,
quebranta mi anhelo
por llenarme de ti...

Y así sabré
que al final del tiempo,
de mis tantas noches,
el recuerdo trémulo
de tu flor radiante...

Trenzará mi aliento,
cimbrará mi cuerpo,
sellará mis labios,
llenará mi mar...

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Hasta mañana, si Dios quiere.

Imagen de Hataiiia Hataiiia. Gracias

jueves, 16 de octubre de 2008

Donde siempre...


Como olas desgastadas
de ese tiempo en plenitud,
va llenándose la vida
de recuerdos y de risas,
de nostalgias y silencios,
de miradas y de besos,
y un poquito de esos sueños
donde siempre moras tú...

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Hasta mañana, si Dios quiere.

Imagen de Massimilliano Uccelletti. Gracias

sábado, 13 de septiembre de 2008

Al alba...


Amanece la añoranza enclavada en la fugaz visión
de lo que un día fue tu luz.

Y otra vez, como queriendo palpitar
en el tumulto de recuerdos,
te hace presa de los sueños que fingieron existir.

El canto del arroyo musita quedamente
un sentimiento fugitivo a pleno sol.

La vida pasa.

El amor permanece.

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Hasta mañana, si Dios quiere.

Imagen de Crina-Paula P. Gracias